En un presente abierto, creativo, inspirador, librepensador, "extrovertido", liberal, innovador, y con un "más allá" ajeno a censuras improductivas, ajeno a "introversiones" lacerantes y paralizantes, ajeno a los "soliloquios mudos" , a la "petrificación" de las ideas, a la inmovilidad de criterios, a la parálisis de un desarrollo imparable, inenarrable en su potencial a futuro, el "tartufismo" ejerce una clara presencia y prepotencia inexcusable dados los "mimbres" intelectuales, los conocimientos "ad hoc", los avances psicofisiológicos en todos los ámbitos del ser humano, a un mejor y mas claro acercamiento a las realidades íntimas del yo, de la persona; a un sinfín de clarificaciones vivas, contrastadas hoy y con un horizonte elocuente de promesas y hechos abiertos en un "mercado "permanente de "imponderables" y "azares" sostenidos, aparecen, de forma reiterada, en un "etorno retorno" nitzscheano el tartufismo y la falsedad, los "oscurantismos" con voluntad de permanencia y encubrimiento, en un esfuerzo denodado por mantener "las esencias" t rigideces "inalterables" en defensa de un amplio marco de "intereses creados" en un esfuerzo vacuo por falta de consistencia en los elementos de pretendida voluntad de permanencia así como en el flaco favor a la persona y a la humanidad en su conjunto. Una "criogénesis" ideológica que pretende mantener un "mas allá ideológico" insostenible dada la falta de veracidad de los contenidos y la evidente prueba de "contraste" que la vida y los avances , de todo orden, imponen una nueva, progresiva y limpia visión de la vida. Un esfuerzo que, indudablemente, tiene sus "rentas" de todo orden y magnitud (ideológicas, económicas, formales, sociales, políticas, etc.) y que, los "lacayos" de tales "servidumbres de interés" defienden y defenderán permanentemente y a ultranza como un "tesoro" de un tartufismo estructurado , bien conservado, mantenido, defendido y con amplio núcleo de defensores de marcados intereses globales.
Estamos, en otro momento. Estamos en un momento de renovación profunda.
En, lo que podríamos denominar " un hoy día" transparente, en un momento donde las "oscuridades y las zonas ocultas y sombreadas, ya no tienen defensa alguna . Donde la demanda personal y social, va en búsqueda de una verdad creciente y progresiva. En busca de un "sentido" al sinsentido de toda "psicografía" y "psicología" del "encierro mental, crítico, ideológico". Una nueva forma de mirar a las "coas", a la vida, a las necesidades. Un nuevo revivir sanador! Un nuevo "ecosistema" con una nueva "ecología" personal en la que la falsedad y el tartufismo quedan marginados en su "parapeto" defensivo y en sus "ecografías deformadas ". En su acérrimo esfuerzo por mantener unos "sitemas" de inamovilidad tranquilizante, en su voluntad de permanente estado de comfort sin alteraciones al "fondo de las esencias defendido", la defensa de tales esquemas vitales (aunque tiene una clara "estabilidad en el tiempo, y en todas las épocas y momentos de nuestra historia; está llamada a un proceso progresivo de "laminación" de las claras insuficiencias y falsedades que acoge bajo "la alfombra histórica"). Son estas palabras, un mero apunte de algo que requiere una mayor y mucho mas intensa profundización aunque es materia de pensamiento con claros horizontes de renovación positiva y un revulsivo notorio al "enjambre" de falsedades "aceptadas," "compartidas", "diseñadas", mantenidas en perjucio de un devenir lúcido que, sin duda, está aquí y estará aunque pasen los años . La fuerza intrínseca de tal visión es incuestionable. que, en su profundización creciente en la apertura y lucidez de las miras,
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