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domingo, 19 de enero de 2020

EL LIDERAZGO DE LA "OBSOLESCENCIA"

EL LIDERAZGO DE LA "OBSOLESCENCIA"

En un espacio y momento de rabiosa presencia de la innovación, creatividad "disruptiva", en simbiosis activa con la constante atención y presencia en todo ámbito del término "liderazgo" , en principio, parece una contradicción en los términos referirse al "liderazgo de la obsolescencia". El uso de las palabras ofrece aspectos plurales y ciertos componentes de ambiguedad dando al "verbo" una potencialidad expresiva plural con múltiples refencias y concomitancias con términos próximos y/o familiares. Aunque , siempre, con una versatilidad y "ambiguidad productiva" en términos de expresión.
Lo primero que hay que hacer para poder determinar el significado del término obsolescencia es establecer su origen etimológico. ... La obsolescencia refiere a la cualidad de obsolescente. Este adjetivo hace mención a algo que se está volviendo obsoleto, antiguo o arcaico y que, por lo tanto, cae en desuso.
"La obsolescencia es la condición o estado en que se encuentra un producto que ya ha cumplido con una vigencia o tiempo programado para que siga funcionando".
Una realidad mas que presente en nuestros días. La celeridad de los cambios. El "tempus fugit " de Heráclito forma parte de una realidad imperativa y en constante transformación. El cambio se ha integrado en nuestros días y en nuestras vidas de manera constante, ágil, "precipitada", muchas veces desconcertante, en un difícil encuadre y metabolización de su incidencia en todos los ámbitos. 
Nos movemos en un marco de dinamismo creciente, de movilidad y aceleración de las ideas, de capitalización de lo nuevo, de inmersión en "lo desconocido", en un ir y venir de sorpresas permanentes que permiten ir avanzando hacia una permanente  creciente mejora en la atención global de necesidades personales y profesionales. 
De ahí que cabe, perfectamente, etiquetar el momento como el momento del "liderazgo de la obsolescencia". 
Precisamente por la velocidad con la que convivimos en términos de la progresiva y acelerada caducidad de ideas, productos, métodos, fórmulas, criterios, etc. el liderazgo evidente está en tal ámbito de la realidad: la obsolescencia. 
Vivimos en un indiscriminado proceso de aceleración sustantiva de los cambios. En un proceso de revitalización y renovación continuada. En un proceso de vitalización de lo nuevo. De lo inesperado. En una búsqueda sin pausa de alternativas con renovado "valor añadido" y con el acento particular en la aportación de nuevas mejoras en todos los frentes. Avances progresivos en un ejercicio imparable de imaginación y creativad innovadora. 
Un momento vital de características específicamente positivas y con un fondo de profunda renovación. Una fuerza energética sostenida en el tiempo y con un singular "aldabonazo" en nuestros días. Un despertar , un renacer llamativo ante unas circunstancias particulares donde los avances globales, en todos los términos, sectores, entornos, modos de pensar, vivir, actuar, etc. se encuentran en un marco netamente novedoso donde aparece la incertidumbre (aunque siempre permanente en la vida) en modos, formas, de hacer, actuar, pensar, ser, vivir. Un sinfín de nuevas propuestas con orientaciones y objetivos particulares diferenciados en búsqueda de una mejora progresiva y acelerada en base a la consecución de un horizonte renovado que permita una mejora cuantitativa y cualitativa de la vida de las personas. Todo ello con un efecto empático necesario en el entorno empresarial, factor decisivo en el apoyo de tal proceso de renovación progresiva y continuada. Una simbiosis necesaria entre las ideas/iniciativas/creatividad personales y el acompañamiento sustantivo y necesario de las empresas , sea el nivel que sea. Desde la gran corporación a la pequeña y mediana empresa. Acompañantes necesarios indudables en este proceso de mejora y empuje hacia avances sorprendentes, en muchos casos. 
Bienvenido, pues, el "liderazgo de la obsolescencia". Es, tal como comentabamos al inicio, aunque una aparente contradicción en los términos, una realidad imparable. 

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